Los granitos: consejos y tratamiento de dermatología

Muchas personas nos consultan acerca del mejor tratamiento para su acné. En este sentido, los siguientes consejos pueden ser de gran utilidad para el paciente:


• Mantener una adecuada higiene diaria de la piel, preferiblemente con productos específicos para esa piel con tendencia al acné.
• Evitar una exfoliación intensa, pues puede promover una mayor inflamación
de la unidad pilosebácea y la aparición de nuevas lesiones.
• Evitar los cosméticos grasos que puedan tener un efecto oclusivo en la piel.
• Cuidar la dieta: se ha visto que las dietas con carga glucémica elevada y la ingesta de lácteos influyen en la severidad del acné. La modificación de la dieta no hará que los síntomas desaparezcan, pero sí puede hacer que el grado de inflamación se module.
• Remitir a un dermatólogo: salvo contadas excepciones, el acné no se cura solo con rutinas cosméticas, y es necesario hacer un tratamiento médico. Esto es especialmente importante en aquellas personas con lesiones inflamatorias que estén dejando manchas o cicatrices, en cuyo caso el inicio precoz del tratamiento minimizará las secuelas a largo plazo.


¿Cómo lo tratamos?


Los dermatólogos tenemos un amplio abanico de tratamientos médicos a nuestra disposición para el acné. En función del número de lesiones, su grado de inflamación y su extensión, estableceremos uno u otro. Recurriremos a tratamientos tópicos en casos de acné preferentemente localizados en la cara sin un grado importante de inflamación ni formación de cicatrices, y enfocaremos el tratamiento con medicamentos sistémicos si este es grave (inflamatorio, con cicatrices) o si así lo prefiere el paciente. Optaremos por esta opción también en caso de que afecte a una amplia superficie de la espalda, hombros y pecho, ya que la aplicación de productos tópicos en estas zonas de forma diaria no es cómoda y suele llevar a un mal cumplimiento del tratamiento. Es interesante acompañar los tratamientos con productos cosméticos y de limpieza adecuados, para lo cual la colaboración con la oficina de parafarmacia es fundamental.
Las personas que inician un tratamiento deben saber que los resultados
habitualmente tardan varias semanas en verse y que han de ser perseverantes y pacientes con el proceso. En ocasiones, es necesario incluso un ajuste del tratamiento en las primeras semanas o meses para optimizar los resultados. Igualmente, el mantenimiento de la mejoría obtenida ha de hacerse a largo plazo con el fin de evitar recaídas indeseadas.

Esperamos os haya sido de utilidad. Feliz día